¿Quién eres?

¿Quién eres?
La persona que está detrás
de esta puerta roja,
la persona que hace temblar
mi humilde morada.

¿Quién eres?
La persona invisible
que me abraza por detrás,
la que veo en el espejo
por ganas de verla.

¿Quién eres?
La persona que siento su calor
en mi pecho latir,
la que noto sus sentimientos
por mis labios pasar.

¿Quién eres?
La persona que me contagia
todas las sonrisas,
la que aporta a mi vida
una gran magia.

Estrofa dudosa

Me asaltan dudas
al pensar,
¿Qué soy para ti?
Y contestar:
sólo uno más,
entonces caen las lágrimas
de mis ojos, y de mi.

Estrofa nocturna

Sólo sabiendo
que vas a sonreír,
sólo sabiendo
que me vas a abrazar,
sólo sabiendo
que tus labios podré besar
y tus sentimientos sentir,
puedo ser feliz y soñar.

Me faltas tú

Me falta tu mano
para agarrar,
me falta tu voz
para escuchar,
me falta tu cintura
para abrazar,
me falta tu comisura
para el beso provocar,
me faltan tus labios
para poder besar.

Debajo del suave manto
que me cubre,
me faltas tú,
a mi lado
evitando del llanto
ser su esclavo,
en la soledad llena de mugre,
la fuente de mi felicidad, tú.

Dos pilares

Los dos pilares,
aquellos que te apoyan,
te empujan y te soportan,
los dos pilares,
un pie en cada pilar
para poder aguantar.

En mi juventud perdí
a un importante pilar,
no me dí cuenta de mi sufrir
hasta que vi
los años pasar,
me empecé a herir.

Vacío en el pecho

Con una cortina,
de carne y risas,
tapo la herida
que aún no cicatriza,
llena de dolor y desgracias.

Tengo un vacío
en este blando pecho,
sólo por el hecho
de una mala infancia,
necesito una ambulancia,
ya que el vacío es mi río.

Me faltó apoyo y valor
para superar la aventura,
me faltó un pilar y amor
para aguantar la tortura
y no perder la cordura.